Todavía nos queda ese dulzor en nuestras pupilas de esos «dieciocho segundos de palmera» como símbolo de las Hogueras en la pandemia. Que las hogueras de 2020 ya son historia, por supuesto, pero eso no quiere decir que se esté de brazos cruzados. Pese a lo atípico de la situación, se intenta que la “llama” siga viva. Ha sido, según la historia alicantina, el segundo año donde no tuvimos plantá de monumentos, ya que según se recoge, sería el año 1937 el primer año, en la entonces corta historia, tras nueve ejercicios, en que no se celebrarían las hogueras, ni tampoco, por supuesto, fiestas lúdicas.
Otro aspecto a destacar es sin lugar a duda el ejemplo de solidaridad que miles de alicantinos, durante los días 21 y 22 de junio, llevaron a cabo con la tradicional ofrenda, que este año se transformó en una multitudinaria muestra de solidaridad, al convertir, por acuerdo de la Federación de Hogueras y Ayuntamiento, celebrar el acto de la ofrenda en una donación de alimentos y productos de primera necesidad para las familias que más sufren los efectos económicos de la pandemia en nuestra ciudad. Todo el mundo festero se sumó a este acto: la asociación de floristerías de Alicante, que ornamentaron floralmente y de forma altruista la fachada del Ayuntamiento, las comisiones de hogueras y barracas, los integrantes del Gremio de Artistas, la Federación de Hogueras, la Federación de Fiestas Tradicionales, la Federación de Asociaciones Festivas en Barrios y Partidas de Alicante (FAFBA), las 28 Cofradias y Hermandades adscritas a la Junta Mayor de Hermandades, la Federación Alicantina de Moros y Cristianos, los de Altozano, Villafranqueza-El Palamó, el Rebolledo y San Blas, así como muchísimas aportaciones de empresas, y por supuesto miles y miles de alicantinos a nivel particular. En total se recogieron más de 26 toneladas de alimentos y productos de primera necesidad. Todo esto queda para la historia.
Tras la finalización de las hogueras 2020 se hizo el balance correspondiente de un año atípico y de un nuevo curso festero, con nubarrones, así como con incertidumbre. Tanto Toñi Martín-Zarco, como presidenta de la Federación de Fogueres de Sant Joan, así como Manuel Jiménez, como concejal responsable de fiestas del Ayuntamiento de Alicante, estuvieron reunidos para hablar más de futuro que de pasado. Tanto Toñi como Jiménez admitieron que la situación por la que estamos atravesando ofrece una oportunidad para mejorar la fiesta, ajustando un calendario saturado en los meses previos a los días grandes. Por eso, van a seguir trabajando en distintos aspectos de la festa; por un lado, tener más tiempo para realizar un estudio que permita seguir haciendo las mascletás desde Luceros, o la condensación de actos, para la elección de la Bellea del Foc, donde se verán nuevas fechas. Los actos de hogueras van a retomarse en septiembre para evitar de esta forma, la posible fuga de comisionados. Por ello, se siguen buscando fórmulas para que las comisiones no se resientan; por ejemplo, la Federación ofrece una fórmula con coste cero para las presentaciones de bellezas o que las candidatas infantiles puedan presentarse aunque superen la edad… Todo esto y más se dijo en la última reunión celebrada a finales del mes pasado. Por un lado, el alcalde la ciudad, presente en la misma, manifestó que el Ayuntamiento sigue volcado con la fiesta para, en 2021, resarcirnos por tener que renunciar este año. En cuanto a la presidenta de la Federación, Toñi Martín-Zarco, dijo que «necesitamos seguir adelante porque corremos el riesgo de que la gente se vaya de las comisiones», mientras que Manuel Jiménez, máximo responsable de fiestas, decía “las presentaciones generan ilusión y economía. Vamos a hacer ya estos actos por lo que pueda pasar”. Y es que tenemos que recordar que cuando se suspendieron todos los actos por la pandemia, quedaban pendientes de presentación nada más y nada menos que 52 presentaciones. En cuanto a la economía, se destacó que 39.176 euros es el remanente al cierre económico. Así acaba la Federación este atípico ejercicio.
Pero como esto siga así, el gremio de artistas destaca que de cada diez talleres de hogueras, seis peligran con el parón de las fiestas. Esto representa un 60% de los talleres, y no por la cancelación de las Fallas y de les Fogueres sino por el futuro incierto de las fiestas del fuego de decenas de pueblos de ambas provincias, donde los artistas consiguen el 80% de sus ganancias. Solo los contratos que los artistas tenían firmados impiden un cierre masivo y para ahorrar o reducir gastos, son cada vez más los profesionales que optan por trabajar a media jornada. Dentro de lo malo que tiene este parón, un total de 35 constructores aprovecharán el mismo, para reciclarse en un curso de modelación digital en 3D e ilustración 2D subvencionados por la Diputación Provincial, un sistema que facilita enormemente la construcción de monumentos, y lo abarata. Según ha manifestado Joaquín Rubio, Presidente del Gremio de Artistas Foguerers, el curso durará dos meses. A través de esta técnica, los constructores aprenderán a diseñar para reproducir luego en corcho todo tipo de piezas de los monumentos, desde ninots a remates, y elementos más pequeños. Algunos de los asistentes a este curso auguran que todo en las Hogueras se hará en tecnología 3D.
Rafael Rodríguez De Gea. Periodista