Te levantas, hace frío, pero tienes ganas de salir y hacer algo distinto y en ese momento te acuerdas de aquel eslogan setentero que rezaba «Haga como el sol, pase el invierno en Alicante» e inmediatamente en tu cabeza mil ideas tintinean y empiezas a pensar por cual decidirte, así que aquí van unas cuantas sugerencias:
Si eres una persona de «distancias cortas hay varios planes urbanos más que apetecibles. Para los mañaneros propongo:
- Visita del yacimiento arqueológico de Lucentum en el Tossal de Manises, declarado Monumento histórico-artístico y que además de ser un enclave con «enjundia» a nivel cultural, resulta un paseo al aire libre muy agradable y accesible, que puede terminar con un estupendo aperitivo junto al mar ya que se encuentra muy cerca de la playa de la Albufereta
- También es buena idea realizar un recorrido por algunos de los museos de la ciudad. Puedes dedicar la mañana a uno de ellos o combinar un par de los situados en el casco histórico, con un «descanso del guerrero» en el mismo museo o en una de las terrazas colindantes.
- Un viaje al pasado es posible visitando alguno de los refugios de la guerra civil. Es necesario hacer reserva y confirmar horarios y accesibilidad en caso de movilidad reducida pues no todos son adaptados.
- Si te apetece algo un tanto peculiar, puedes realizar por ejemplo «La ruta de Hans Christian Andersen», el famoso escritor danés que visitó Alicante en el siglo XIX. Llegó en tren desde Almansa y se hospedó en la zona de la Rambla, visitó todo el centro y le sorprendió entre otras cosas la luminosidad y los productos del mercado. Seguro que le sirvió de inspiración para alguno de sus cuentos… Puedes realizarla en una visita organizada con guía local para no perderse nada.
- A 10 kilómetros del centro de la ciudad, puedes conocer El parque «La Marjal». En esta época del año es una estupenda idea. Se trata de un parque único por su condición de «inundable» que es una iniciativa pionera en España donde la flora autóctona es su mayor atractivo ya que es un espacio verde que lucha contra el cambio climático que curiosamente se encuentra en una zona de amplio desarrollo urbanístico, lo que le confiere un punto de «oasis» en medio de la vorágine
https://www.alicante.es/es/equipamientos/parque-marjal
- Para aquellos que simplemente quieran descansar, un paseo por la playa de San Juan en los meses invernales es una auténtica delicia, con el sol de cara y vistas a una arena lisa, como si estuviera «sin estrenar» con una panorámica en la lejanía de la insólita combinación de las imponentes montañas y la franja costera hasta la isla de Benidorm como escenario de antiguas leyendas de corsarios y se puede terminar con una «paraeta» en alguno de los establecimientos que permanecen abiertos todo el año.
- Finalmente, si eres amante del «spotting» puedes fotografiar aviones junto a la valla perimetral del «Aeropuerto del Altet» y a continuación disfrutar del paseo marítimo de la playa de Urbanova, donde podrás encontrar locales de restauración muy recomendables.
Pero si eres más de «aventuras vespertinas» te propongo:
- Ver una obra en el Teatro Principal de Alicante, y al terminar un tapeo por esa misma zona.
Tienes toda la programación aquí: http://www.teatroprincipaldealicante.com/
- Si eres un poco más alternativo, la programación del Teatro Arniches seguro que te atrapa.
http://www.teatres.gva.es/
- Si eres un apasionado de la música clásica y de la lírica en general, los conciertos del ADDA, Auditorio de la Diputación de Alicante te encantarán.
http://www.addaalicante.es/
- Y si lo que te interesa son las charlas, talleres y otras actividades culturales, hay varios lugares en la ciudad con programaciones muy atractivas y con la ventaja de estar situados en pleno centro de la ciudad. Entre ellos podemos encontrar:
- La sede de la Universidad de Alicante http://web.ua.es/es/sedealicante
- Instituto Juan Gil Albert y Casa Bardín http://www.iacjuangilalbert.com/
- Casa Mediterráneo http://www.casa-mediterraneo.es/
- Fundación Mediterráneo Alicante http://fundacionmediterraneo.es/
O simplemente puedes dar un paseo y poner la guinda cenando en uno de los muchos restaurantes y bares con interesantes propuestas.
Y al regresar, te encerrarás de nuevo en tu rinconcito acogedor de manta y sofá, pero con la sensación de haber vivido un poquito más intensamente ese día que amaneció tan desapacible…
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